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30 de Agosto 2004

Noche tonta en edificio inteligente

Zzzzz

Esta zona de la ciudad está muerta de madrugada, a diferencia de otras donde el tráfico nunca se detiene. A mi izquierda los monitores se siguen llenando de números, de columnas interminables de cifras. Son las tres de la mañana en el décimo piso y sólo quedan los guardias de seguridad. Como un sonámbulo en los pasillos enumero las cosas que no necesito tocar; ninguna puerta, ningún botón, ninguna ventana, ningún control, ninguna llave. ¿Qué escudriñan los monitores, las cámaras? ¿Cómo interpretan mi sonrisa misteriosa? ¿Como hastío? ¿Sabrán los infrarrojos que sonrío porque recuerdo?

Ayer estabas acostada en el sofá de la sala. Tenías los ojos cerrados y a diferencia de otras veces yo no podía tocarte. Escuchabas la música que tenía puesta. Siempre te pongo música; tengo la leve esperanza de que en otra circunstancia vuelvas a reunirte con esas melodías. Te pongo la música de forma tan incidental, tan aparentemente descuidada, porque no quiero que me recuerdes. Sólo quiero que algún día, si te encuentras con esta canción, algo dentro de ti se mueva sin que sepas de qué se trata. Pero no tengo pruebas de esta efectividad subliminal. Hoy me basta con verte, pero he aquí mi mejor definición de melancolía: Antes podía tocarte.

Salgo de la habitación y las luces se apagan.

Publicado por Pável 30 de Agosto 2004 a las 12:31 PM