el club de los insomnes

Difusión, dispersión, selección, uso, libertad

“el público ya no está obligado a comprar, tiene acceso a la maquinaria (computadores, fotocopiadoras, ... ) y el copyright es un arma que dispara contra la multitud.”

“Cuando compras uno de nuestros libros, estás eligiendo recompensar nuestros esfuerzos. Pero no estás obligado a hacerlo: como alternativa puedes copiarlo, descargarlo de nuestro sitio etc.
Lo que no puedes hacer es introducir restricciones a esta libertad.”

Wu Ming.

Wu Ming es el seudónimo que ahora usan los autores de Q, la apasionante novela que vio la luz pública en Italia, en 1999. Q fue firmada con otro seudónimo: Luther Blissett. Por el tema y tono de la narración muchos lectores llegaron a pensar que quien se encontraba detrás de la novela era Umberto Eco.

La historia que narra Q tiene distintas lecturas: Es una novela de espías cuya acción transcurre en el siglo XVI, en la época de la reforma luterana. Pero también ha sido vista como una alegoría de la época actual.

Q es un espía al servicio de un poderoso cardenal italiano, quien le envía por toda Europa para seguir de cerca los movimientos disidentes de aquellas épocas. Así, Q se infiltra entre los seguidores de Lutero, entre los nuevos profetas alemanes, entre los anabaptistas de Amberes. En cada uno de los lugares donde se mueve provoca la caída de dichos movimientos, al ganarse la confianza de los líderes y traicionarlos. Pero algunos disidentes logran huir y las ideas diferentes logran transmitirse sin que nadie pueda detenerlas, debido a un nuevo invento: La imprenta. Los autores recrean los primeros días donde repartir un volante era algo revolucionario; y cuando el verdadero poder tuvo un detentador más, aparte de Emperadores y Papas: Los bancos, dueños de la circulación del dinero.

Del siglo XVI al siglo XXI nos hemos desplazado a las antípodas: En los primeros años de la imprenta fue la novedad de la difusión de ideas lo que revolucionó al mundo y le permitió cambiar; en estos días tengo la impresión de que la sobrecarga de información es la que aturde al ciudadano o le hace huir de la misma, provocándole cierta apatía. Muchísimas mentiras y distorsiones de los hechos son difundidos a través de noticias, publicidad, etc. Mucha gente se aparta asqueada y mucha más cree a pie juntillas todo lo que mira, escucha, lee. ¿Cómo encontrar el justo medio entre la ingenuidad que alieniza y el rechazo que paraliza?

Q como obra es sólo parte de una posición política que asumen los autores: Omnia sunt Communia (todo es de todos). Su bandera más activa es la lucha contra el Copyright.

Publicado por Pável 7 de Enero 2004 a las 01:32 PM